Este pasado lunes fuí al cine con mi novia y mi sobrino a ver Up en 3-D y es que me declaro un admirador de la factoria Pixar, en una industria cada vez con menos films inovadores y tanto reamake, siempre es un soplo de aire fresco ir al cine, comprarte un buen recipiente de palomitas y simplemente disfrutar de una pelicula de animación, supuestamente para niños pero que da lecciones a mayores sobre humanidad, lealtad, amistad y amor. Con un guion impresionante y una puesta en escena que ya querrian muchos directores que hay de moda ahora. La pelicula es trepidante de principio a fin, si bien con los diez primeros minutos les basta para enternecernos con el personaje y dejarnos totalmente con un nudo en la garganta. Los 3-D le sienta la mar de bien dandole mayor profundidad a unos escenarios impresionantes. Una obra maestra
